Más de 200 trabajadores del sector salud mantienen plantón en Casa Michoacán en Morelia; exigen regularización laboral y atención presupuestal antes de la transición al IMSS-Bienestar
Morelia, Michoacán.-La presión de los trabajadores del sector salud escaló este martes hacia Casa Michoacán, donde más de 200 integrantes del Sindicato de Médicos y Enfermeras (Simetra) instalaron un plantón en el acceso principal para exigir que el gobierno estatal y la Secretaría de Salud abran, por fin, una mesa de negociación.
Con lonas colgadas en la entrada y una presencia continua desde las primeras horas del día, los manifestantes recalcaron que su movimiento permanece pacífico, aunque sin intención de retirarse mientras no exista respuesta.
El dirigente de Simetra, Pablo Figueroa Martínez, reiteró que el origen de la protesta es el rezago acumulado de miles de trabajadores que llevan años sin certeza en su situación laboral.
Según describió, el sector arrastra al menos tres pendientes urgentes: la regularización de 3 mil 500 empleados eventuales, algunos con hasta 18 años bajo contrato.
La asignación ordenada y conforme a la normatividad de entre 600 y 800 plazas vacantes; y la homologación de prestaciones para el personal formalizado en 2014, 2015 y 2016. Sin estos avances, advirtieron, la transición al IMSS-Bienestar acarrearía pérdida de derechos.
La protesta de hoy forma parte de una semana de presión constante. La jornada comenzó con bloqueos en Acueducto y Ventura Puente y continuó con la toma del Congreso local.
Desde entonces, los trabajadores siguen todos los movimientos del Legislativo: primero acudieron al hotel Cantalagua, luego al Fiesta Inn Altozano, donde durante la madrugada del 8 de diciembre la Unidad de Restablecimiento del Orden Público los replegó luego de que intentaran mantenerse en el acceso principal.
Figueroa señaló que en ninguna de las sedes alternas han sido atendidos por diputadas o diputados.
Asegura que tanto el gobierno estatal como la Secretaría de Salud han negado sistemáticamente abrir la mesa de diálogo solicitada desde la semana pasada.
“Seguimos esperando que nos atiendan. La mesa se ha pedido una y otra vez y no hay respuesta”, dijo.
Las presiones del sector también han generado debate en el Congreso. Legisladores como Abraham Espinoza Villa y Alejandro Bautista Tafolla exigieron desde tribuna que se atienda de inmediato a los trabajadores y se revise el déficit presupuestal que impide su regularización.
Según cálculos de la propia autoridad sanitaria, se requieren entre 200 y 250 millones de pesos para formalizar un primer bloque de empleados eventuales.
En contraparte, el diputado Baltazar Gaona afirmó que las demandas no corresponden al ámbito legislativo y que los trabajadores están mal asesorados.
Desde fuera, los manifestantes rechazan tal postura y sostienen que, al no haberse concretado su transferencia al IMSS-Bienestar, sí es responsabilidad tanto del Ejecutivo como del Legislativo garantizar derechos laborales y asignar recursos suficientes al sector salud en 2026.
Los trabajadores anunciaron que permanecerán en Casa Michoacán hasta que se fije fecha para una mesa formal de negociación.
