José Antonio Kast triunfa en las elecciones presidenciales de Chile, logrando un histórico 58.61% de los votos y marcando un cambio político significativo.
José Antonio Kast, candidato ultraderechista, se impuso en las elecciones presidenciales de Chile, superando con un amplio margen a la izquierdista Jeannette Jara.
Con más del 83% de los votos escrutados, Kast obtuvo el 58.61% frente al 41.39% de Jara, según los datos preliminares del Servicio Electoral (Servel).
El exdiputado y fundador del Partido Republicano triunfó en las 16 regiones del país, incluso en bastiones tradicionales de la izquierda como Valparaíso y la Región Metropolitana, que incluye la capital.
También dominó en las regiones mineras del norte y las agrícolas del sur.
“Hace unos minutos recibimos la llamada de Jara”, declaró Arturo Squella, mano derecha de Kast y presidente del Partido Republicano. “Nos sentimos muy orgullosos del trabajo realizado, muy responsable de este tremendo sacrificio de hacernos cargo de las crisis por las que atraviesa Chile”, añadió Squella.
Este resultado marca la segunda victoria más significativa desde el regreso a la democracia, solo superada por el triunfo de Michelle Bachelet sobre Evelyn Matthei en 2013.
Kast, conocido por su apoyo al régimen de Augusto Pinochet en el plebiscito de 1988, es el primer pinochetista en llegar a la presidencia en democracia.
El único otro derechista en ocupar la presidencia desde el retorno a la democracia fue Sebastián Piñera, quien gobernó entre 2010-2014 y 2018-2022, y se opuso a la permanencia del dictador.
Kast, padre de nueve hijos y ferviente católico, asumirá la presidencia el 11 de marzo, recibiendo la banda de su contrincante en 2021, Gabriel Boric.
Desde 2006, el poder ha oscilado entre la izquierda y la derecha, sin que ningún presidente haya entregado el cargo a un sucesor de la misma tendencia política.
La campaña electoral se centró principalmente en el aumento de la delincuencia y la migración irregular, a pesar de que Chile sigue siendo uno de los países más seguros de la región.
Kast, con conexiones con líderes ultraderechistas de la región, ha prometido medidas como la expulsión masiva de migrantes, criminalizar la migración y construir prisiones de máxima seguridad para narcotraficantes.
Sin embargo, enfrentará un Congreso sin mayoría clara, con la derecha y ultraderecha a solo dos diputados de la mayoría y un Senado empatado con la izquierda.
