Hombre que mató a nueve personas en Surinam, incluidos varios niños, se suicida en su celda tras ser detenido por la policía.

Un hombre de 43 años acusado de apuñalar fatalmente a nueve personas, entre ellas cuatro de sus propios hijos, se suicidó este lunes en una celda policial de Paramaribo, informó la policía local. El sospechoso fue hallado sin vida en la mañana tras haber sido detenido por el ataque ocurrido días antes en el distrito de Commewijne.

“En ese momento no había nadie presente, y se ahorcó”, declaró Harish Monorath, ministro de Justicia y Policía.

El violento episodio ocurrió en la madrugada del domingo en Richelieu, cerca de la capital, cuando el agresor presuntamente atacó primero a miembros de su familia y luego a vecinos, provocando múltiples muertes y dejando también dos heridos graves.

“Según tenemos entendido, todo comenzó en el hogar. Dos niños lograron salir de la casa y llamaron a su abuela, que vivía al otro lado de la calle”, comenta el ministro. “La abuela y el abuelo acudieron en su ayuda, con consecuencias fatales para ellos, el hombre se dirigió entonces a otra casa, donde se encontraban los demás vecinos y otro niño”.

Al ser confrontado por las autoridades, el hombre se resistió y fue herido de bala en la pierna, por lo que fue llevado a un hospital y posteriormente trasladado a una comisaría en Keizerstraat, donde se quitó la vida mientras estaba bajo custodia.

“Tras matar a las personas, se dirigió a la casa de su familia, un poco más abajo en la misma calle, probablemente para matarlos también. Allí fue detenido por la policía”, concluyó.

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Las investigaciones preliminares sugieren que el agresor podría haber tenido problemas de salud mental, aunque las autoridades continúan revisando los detalles que llevaron a este trágico suceso.

“Esta tragedia nos afecta como nación en un momento en que celebramos juntos la Navidad y nos preparamos para el Año Nuevo, una época que debe estar marcada por la solidaridad y la esperanza”, comentó la presidenta Jennifer Geerlings-Simons.

El gobierno de Surinam y la policía han expresado su consternación por los hechos, que sacudieron a la comunidad y generaron un llamado a fortalecer apoyos sociales y atención psiquiátrica en casos similares.

Fuente: Milenio/wtop